La vacunación es un acto fundamental y estratégico que ayuda en la reducción de la morbilidad y la mortalidad infantil, completar el esquema actual de vacunación es un mecanismo apropiado para evitar la aparición de enfermedades infectocontagiosas, evitar estados incapacitantes e incluso las defunciones en menores de 5 años.
La inmunización previene cada año entre 2 y 3 millones de defunciones por difteria, tétanos, tos ferina y sarampión. La cobertura vacunal mundial —la proporción de niños de todo el mundo que reciben las vacunas recomendadas— se ha mantenido estable en los últimos años. Durante 2014, se administraron tres dosis de la vacuna contra la difteria, el tétano y la tos ferina (DTP3) al 86% de los niños de todo el mundo (unos 115 millones), a fin de protegerlos contra graves enfermedades infecciosas que podrían provocarles trastornos y discapacidades graves, e incluso la muerte. Para 2014, 129 países habían alcanzado por lo menos el 90% de cobertura con la vacuna DTP.
Principales retos: A pesar de los progresos logrados en el último decenio en materia de cobertura vacunal mundial, aún persisten disparidades regionales y locales como consecuencia de: Recursos limitados; Prioridades sanitarias concurrentes; Gestión deficiente de los sistemas de salud; y Seguimiento y supervisión inapropiados.
En 2014 se calcula que 18,7 millones de lactantes de todo el mundo quedaron fuera del alcance de los servicios de administración sistemática de vacunas, por ejemplo la DTP. Más del 60% de ellos viven en 10 países, a saber: Etiopía, Filipinas, India, Indonesia, Iraq, Nigeria, Pakistán, República Democrática del Congo, Uganda y Sudáfrica. Es preciso acordar prioridad al fortalecimiento de la vacunación sistemática en todo el mundo, especialmente en los países que albergan el mayor número de niños no vacunados. Es necesario redoblar esfuerzos para llegar a los grupos desatendidos, en particular los de zonas aisladas, entornos urbanos desfavorecidos, Estados frágiles y regiones asoladas por conflictos. Hay tres medidas clave para eliminar las disparidades en materia de inmunización: integrar la inmunización en otros servicios de salud, como la atención posnatal para madres y recién nacidos; reforzar los sistemas de salud de modo que las vacunas se sigan administrando incluso en periodos de crisis; y velar por que las vacunas sean accesibles y asequibles para todas las personas.
PREGUNTA:
¿Cuáles son los principales retos en la cobertura vacunal según la OMS?
Fuente: Organización Mundial de la Salud